Embajadas que utilizan jabones caseros

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BOLETIN 005 - ABRIL 2009
EDITORIAL
CONSUMIDOR CONSCIENTE
CREA TU EMBAJADA DEL REINO ORIGINAL
GRÁFICAS DE OKI
RESUMEN DE NOTICIAS
APRENDIENDO A COCINAR
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Como antes hemos mencionado, una Embajada del Reino Original es un territorio sin crueldad. Eso significa que es un lugar donde no se consumen productos de origen animal, tanto en la comida como en las ocupaciones diarias. Por eso queremos compartir esta receta de jabón casero. Si bien uno de los ingredientes es la soda cáustica, que produce una reacción química fuerte cuando se prepara el jabón, el resultado es un producto de menos impacto que un jabón normal, sin ingredientes dañinos y reutilizando el aceite residual de la cocina.


Te recomendamos que en las embajadas se utilicen detergentes biodegradables o ecológicos y que los productos de limpieza no sean testeados en animales. Infórmate y compártelo con tus amigos. Muchos colaboramos con el daño a la naturaleza, sólo por no estar lo suficientemente al tanto.
Intenta esta práctica receta. Probablemente en la primera oportunidad el resultado no será el mejor, pero no te desanimes: la manufactura artesanal, al igual que la cocina, necesita un poco de experiencia, poco a poco conseguirás “coger el punto” de un buen jabón artesanal.

El proceso en frío para fabricar jabones caseros constituye una forma excelente de aprovechar el aceite que se deshecha después de la fritura, al mismo tiempo que se protege el medio ambiente, evitando la contaminación que estas grasas producirían.

Colabora con la ecología y contribuye con tu bolsillo, aprendiendo esta simple receta de jabón ecológico casero.

Receta para hacer jabón ecológico casero.

Ingredientes (en proporción):

4 litros de aceite sobrante de freír
4 litros de agua
1 kilo de soda cáustica en escamas (hidróxido de sodio sólido con riqueza del 99 al 100%; se adquiere en cualquier droguería en bolsas de 1 kilo).
Un recipiente largo o varios moldes pequeños para verter la mezcla.
Pasos a seguir:

En un recipiente se vierten los 4 litros de agua y se disuelve 1 kilo de soda cáustica. ¡Cuidado! Esta solución es como la lejía: quema y es algo más corrosiva que la lejía común, por lo que conviene manipularla con precaución. Los envases suelen advertir de quemaduras, uso de guantes para manipularla y protección de ojos y cara.

El consejo de los jaboneros es que, además de las protecciones habituales, se vierta la soda poco a poco y sin salpicar en el recipiente que ya contiene el agua. Al verterla, el agua parece hervir y despide un vapor de olor fuerte e irritante, por lo que es conveniente realizar la operación en un lugar abierto o al aire libre y remover con un palo largo, de modo que se pueda manipular y remover a cierta distancia y no se aspire el vapor.

Es necesario remover durante 15 a 20 minutos para conseguir que toda la soda se disuelva en el agua. El aspecto después de disolver es el de agua clara.
Cuando la soda cáustica se ha disuelto bien, se añaden despacio y removiendo los 4 litros de aceite. Sirve cualquier aceite alimenticio: oliva, girasol, de freír, de conservas en aceite. Basta con colar los residuos y restos sólidos para que el jabón quede limpio.
Se remueve durante 30 a 45 minutos, hasta conseguir una pasta homogénea y viscosa. Como ocurre con la mayonesa, se debe girar a ritmo continuo y en un único sentido para que la pasta no se corte. En algunas ocasiones hay que añadir algo de agua y, en rarísimas ocasiones, algo de aceite para conseguir una pasta homogénea.

El resultado es una crema densa y caliente (la reacción química de formación del jabón genera algo de calor). La crema debe verterse en los moldes que darán forma final al jabón o en un recipiente rectangular que permita después hacer tacos o pastillas. A gusto del activista.
El resultado se deja reposar durante toda la noche.
Al día siguiente, cuando se ve que la pasta ha cuajado, se saca del recipiente, ya en forma de jabón sólido pero blando, y se corta en tacos que se dejan secar en un lugar fresco. Es importante cortar ahora el jabón en los trozos finales que se deseen, ya que su consistencia en ese momento es la del turrón blando. Después, transcurridos unos días, el jabón estará muy duro y será muy difícil de cortar.
Fuente: www.innatia.com

Coméntanos cómo resultó tu primer jabón artesanal: contacto@originalkingdom.com